Nunca he tenido mucha afición por hacer planes, pero si muchas ilusiones, deseos y sueños que me gustaría llevar a cabo. A priori, puede parecer lo mismo, pero yo no lo veo así.
Los planes, necesitan de una estrategia, organización, una cosita destrás de la otra. Pero soy un desastre y cuando trato de "hacer planes" como las personas que se visten por los pies, nunca resultan como esperaba. Eso no quiere decir que terminen mal, simplemente...de diferente manera a lo planeado o directamente, lo contrario.
Mis ilusiones, deseos y sueños, cuando ven la luz, lo hacen de una manera más espontanea y circunstancial. Se mantienen dentro de mi de una forma latente por un tiempo, dias , meses, años o muchos años y de repente, las estrellas se alinean y reconozco el momento, la oportunidad y surge sin más. Me gusta pensar que lo que a mi me pasa es casi mágico, pero yo sé que no es así. Cuando echo la vista atrás, me doy cuenta de que llevo toda mi vida sembrando lo que voy recogiendo y que nada es casual. Para contrarrestar mi desastrez, me concedieron el don de ver el preciso momento y le saco partido. ¡Menos mal, sino... no sé qué iba a ser de mi!